Joel Lázaro Carbonell Guilar
Activista de Derechos Humanos
30 de Octubre de 2011
La Habana. Al preso político Raúl Rodríguez Soto, se le suspendió la visita familiar reglamentaria, por órdenes del jefe de la prisión, para obligarlo a vestir el uniforme de recluso.
Este pasado sábado 29, desde la prisión de Guanajay, Raúl informa a este reportero por vía telefónica, “que era día de su visita, su esposa estaba en las afueras de la prisión y el jefe de la misma, le dijo, que no la iba a ver, si no se vestía de preso”.
Rodríguez asegura que este alto oficial tiene conocimiento de sus enfermedades “pero lo que quieren, mandados por la seguridad es doblegar mis principios a base de chantaje por mi activismo político dentro de la prisión”- dice.
Este preso político, ha pasado por varias prisiones, cumpliendo una sanción de 30 años de privación de libertad, por supuesto tráfico de personas. Soto padece de múltiples enfermedades crónicas, agudizadas en cautiverio, una de ellas afectándole el sistema de locomoción lo cual lo tiene confinado a una silla de ruedas.
Soto, posee un certificado emitido por un médico, cuando se encontraba ingresado en el hospital de la prisión “Combinado del Este”, el cual, le prohíbe vestirse con el uniforme de preso, ya que la tela del mismo le afecta la piel “en varias prisiones de la que he estado conociendo de mi enfermedad han intentado esto del uniforme sin logro alguno, pero no han llegado al extremo que llego este” señala.
El 21 de Julio del pasado año, este fundó el Movimiento “10 de Diciembre” conjuntamente con otros reclusos dentro de la prisión; grupo que aboga por los Derechos elementales del hombre.
Presume este, que detrás de todas las injusticias que se cometen con él, esta la mano de la policía política. “El odio que sienten hacia mí por estar en contra del régimen Castrista lo descargan de la manera más cínica e injusta sobre mí persona” concluye.
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